Las primeras ideas y los primeros pensamientos surgen en la
infancia, una etapa que dicen que nos marca fuertemente en nuestra vida. Pues a
mi me marcó fuertemente El Rey León (Roger Allers y Rob Minkoff, 1994). Si no fue la primera, fue de las primeras
películas que vi y además, recuerdo haberla visto en el cine. A tan corta edad
obviamente no fui consciente del trasfondo de la película ni de lo que quería
transmitirme, así que la vi muchas más veces para tratar de comprenderla.
Esta película cuenta la historia de un león que intenta
buscar su lugar en el mundo ayudándose de lo aprendido por las generaciones
anteriores y por él mismo. De esta manera se pretende de forma alegórica, que
el espectador se identifique con el momento en el que tiene que asumir ciertas
responsabilidades. Simba vive una serie de aventuras que le harán adquirir
confianza en sí mismo para ocupar el lugar que le corresponde y realizar lo que
se espera de él.
Los artistas de la película estuvieron en África para
plasmar esa naturaleza en cada plano del largometraje. Se inspiraron en
paisajes y animales para dar vida a unos dibujos de animación gracias a esa
visita al continente africano. En cuanto a la música, se buscaron todo tipo de
sonidos que pudieran ayudar a la consecución del objetivo de representar África
en la película. El resultado final de este gran esfuerzo fue el Oscar a la
mejor banda sonora y mejor canción original.
Cabe destacar también que esta película tiene muchas
similitudes con Hamlet, la obra teatral de William Shakespeare. Los productores
reconocieron que El Rey León está basado en ella. Principalmente, podemos
observar que en ambas historias el rey es asesinado a manos de su hermano para
acceder al trono. Posteriormente, destierra al hijo heredero creyéndolo muerto
pasado el tiempo. El padre fallecido se aparece al hijo, que ayudado por sus amigos buscará venganza a raíz de ese encuentro y provocará la muerte de su tío.
En resumen, a partir de una pequeña idea podemos conseguir
grandes cosas. Así es como nació El Rey León, con la simple idea de contar una
historia sobre el reino animal. Un cachorro de león inseguro que se hacía mayor
y tenía que encontrar su lugar, reforzada esta historia con la adaptación de Hamlet, una de las obras
teatrales más importantes, y gracias al gran trabajo de todos los participantes
en el film, consiguieron dar vida a la sabana africana. Logrando calar tanto en niños como adultos, de manera que encontraran su lugar en el ciclo de la vida.
"Algún día Simba, el sol se pondrá en mi reinado y ascenderá siendo tú el nuevo rey." Mufasa